Sala de Prensa

1 abril, 2015

‘Los bufetes fichan a periodistas, ingenieros, psicólogos y químicos’, reportaje con la opinión de Gladys Alarza y Yolanda Ramiro, Directoras de IT y Marketing, respectivamente, de ECIJA.

El mayor tamaño y la profesionalización de los despachos en España ha supuesto que los abogados vayan dejando hueco a profesionales con titulaciones diversas, ajenas a los estudios de Derecho.

Hasta hace no muchos años, en los bufetes en España casi todos los trabajadores, a excepción de las secretarias y algún contable, eran abogados, incluso para realizar otras tareas de gestión como selección de personal, desarrollo de negocio o dirección corporativa. Sin embargo, en el sector legal -sobre todo el segmento relacionado con la abogacía de los negocios- se ha ido detectando un cambio de tendencia. Cada vez más firmas de un cierto tamaño cuentan en sus filas además de abogados y economistas: graduados en Administración y Dirección de Empresas, ingenieros, químicos, psicólogos, sociólogos, documentalistas o periodistas.

Por una parte, los despachos han ampliado sus áreas de práctica y han ido requiriendo nuevos perfiles. Por ejemplo, el asesoramiento fiscal plagó muchos bufetes de economistas, algo que antes no era tan habitual. Otras firmas, sobre todo las Big Four, los despachos más grandes o las boutiques hiperespecializadas, se dieron cuenta de la importancia del conocimiento sectorial profundo en sus asesoramientos, pero no sólo desde el punto de vista legal, y crearon equipos o áreas donde los abogados trabajaban con ingenieros industriales (por ejemplo para el tema de patentes), informáticos, licenciados en medio ambiente o farmacéuticos, entre otros. Garrigues, por ejemplo, fue unos de los bufetes pioneros al recibir como una de las herencias de Arthur Andersen, lo que se convirtió en Garrigues Medio Ambiente, ahora G-Advisory, donde trabajan multitud de trabajadores con perfiles no jurídicos. Por otro lado, firmas de servicios profesionales, como KPMG o PwC, también se caracterizan por crear entornos de asesoramiento multidisciplinares y sectoriales, donde es habitual que en una mesa convivan multitud de profesiones.

Profesionalización

Por otro lado, el nuevo detonante que explica esta diversidad de titulados en un mundo tradicionalmente sólo de abogados es la profesionalización de las firmas jurídicas. Juan San Andrés, psicólogo y consultor en productividad, organización y factor humano, asegura que «cuando se empezó a producir un crecimiento enorme en las firmas, la competencia también creció, y los despachos se dieron cuenta de que sólo podían ganar clientes si se los quitaban a otras firmas. Por eso se empezó a trabajar en temas como el desarrollo de negocio, la reputación, una mejor organización, tener mejores márgenes, y para todo esto se tuvo que contratar a profesionales que supieran de verdad de estos temas y no usar a abogados reciclados, como hasta entonces».

La directora de recursos humanos de Garrigues, Lourdes Ramos, ha podido ver un cambio importante en los 27 años que lleva trabajando en la firma más grande de Europa continental. «Es lógico que con el crecimiento que han experimentado muchos despachos, tanto en tamaño como en desarrollo, se ha contratado a muchos profesionales para diversas áreas de apoyo. En Garrigues, por ejemplo, fuimos pioneros en entender y dar valor a la gestión en sí misma», explica. Ramos añade que «lo importante es que todos los componentes de los departamentos internos siempre tengan claro que tienen que estar orientados al cliente».

Por su parte, Yolanda Ramiro, directora de comunicación y márketing de ECIJA, cree que la evolución del propio mercado laboral también ha contribuido a la profesionalización de la gestión. «La formación de las personas, la existencia de escuelas de negocios de calidad o el desarrollo de la sociedad de la información y de la capacidad innovadora han sido elementos clave de este cambio. Los profesionales están cada vez mejor formados para ocupar puestos de gestión para los que se requiere una formación, aptitudes y competencias específicas, distintas a las del abogado», explica.

San Andrés añade que una de las cosas importantes a tener en cuenta en los profesionales de gestión y organización de las firmas es que «si contratas a trabajadores excelentes con currículos brillantes porque aspiras a tener a los mejores en estos puestos, igual que quieres tener a los letrados más cualificados, no puedes luego no darles una carrera en la firma».

En este sentido, en la gran mayoría de los bufetes, los trabajadores de servicios generales que no ejercen como abogados asesorando a clientes, aunque tengan formación jurídica y hayan sido abogados con anterioridad, no pueden ser socios, aunque tengan importantes cargos de gestión en la organización.

Gladys Alarza_ECIJA

Gladys Alarza. Ingeniera informática. Dtra. IT. ECIJA.

Ecija es uno los bufetes que, en porcentaje, más profesionales no jurídicos tiene en sus filas, pues reúne a muchos perfiles relacionados con la tecnología. Es el caso de Gladys Alarza, la directora de tecnologías de la información, que depende de los socios de esta área. Es ingeniera técnica informática de gestión y grado en Informática por la Universidad Carlos III. «Me dedico a gestionar y a administrar todos los servidores, los sistemas tecnológicos, telefonía e InterneT. que usan los abogados del bufete, además de apoyar a los equipos que asesoran a otros clientes. Es evidente que el perfil técnico es lo que más nos diferencia de los letrados», afirma.

Enlace al reportaje completo publicado en Expansión ed. impresa: ‘Los bufetes fichan a periodistas, ingenieros, psicólogos y químicos’

Enlace al reportaje completo publicado en Expansión ed. digital: http://www.expansion.com/juridico/2015/03/31/551ae1bbca47413d678b4577.html