Operación inmobiliaria en el sector legal: los bufetes que cambian de sede el próximo curso
Algunos de los grandes bufetes del país cambiarán de sede a partir del próximo mes de septiembre, como Ecija, Sagardoy, DLA Piper u Ontier. Y otros, como la firma andaluza Montero Aramburu, estrenarán oficina en Madrid a principios de 2023.
Después de adaptarse a marchas forzadas al teletrabajo durante los primeros compases de la pandemia, han retomado la actividad inmobiliaria, que acusa un notable descenso de operaciones desde 2020. No en vano, la cultura de la presencialidad sigue imperando en el sector legal, donde la mayor parte de las actividades se realiza en la oficina.
Pero a diferencia de lo que ocurrió con el gran movimiento de sedes que tuvo lugar entre 2017 y 2019 hacia la milla de oro de la capital, con la calle Serrano como principal punto neurálgico, los despachos han optado por diferentes ubicaciones que van de la Castellana al paseo de La Habana. Aunque hay criterios bastante homogéneos que siguen repitiéndose en este tipo de operaciones, como la preferencia por localizaciones céntricas, edificios con carácter o plantas altas, han surgido nuevas necesidades que ha apuntalado la situación de emergencia sanitaria.
Así, por ejemplo, destaca la demanda de salas de reuniones híbridas, donde se juntan los profesionales con independencia del lugar físico en el que se encuentran gracias a las soluciones tecnológicas, más espacios colaborativos que llamen a los abogados a ir físicamente a las oficinas y menos despachos privados, ligados fundamentalmente a los profesionales que se encuentran en los niveles altos o intermedios de las estructuras jerárquicas de los bufetes.
Criterios ESG
En la agenda inmobiliaria de los despachos también se ha colado la importancia de la estrategia en materia ESG (siglas en inglés de environmental, social & governance), que hacen referencia al medio ambiente, impacto social y gobierno corporativo. Y es que, como pone de manifiesto un informe de este año de la empresa de capital inmobiliario CBRE, “la sostenibilidad ya no es opcional” para las firmas legales, que buscan edificios que demanden menos energía, luces que se enciendan y apaguen automáticamente en función de la hora del día o agua caliente sanitaria producida con energía solar.
A la vista de la actividad por parte del sector legal en el mercado de las oficinas de Madrid y Barcelona, CBRE apunta que los despachos que ocupan menos de 5.000 metros cuadrados permanecen en sus sedes una media de diez años, en la línea de los nueve de las empresas del sector financiero y lejos de los cinco de las compañías tecnológicas. Y un promedio de trece años si superan este espacio. Habrá que esperar, por tanto, para que se produzcan grandes movimientos nuevos en el sector legal.
ECIJA

“EL NUEVO EDIFICIO REFLEJA NUESTRO POSICIONAMIENTO EN EL MERCADO”
Ecija trasladará su sede en Madrid a principios de 2023 desde la actual ubicación en la Torre de Cristal de la Castellana al corazón de la milla de oro, en la calle Serrano, 69. La firma ocupará todo el edificio, un inmueble de más de 5.000 metros cuadrados repartidos en siete plantas arrendado por diez años. Según explican, el crecimiento de Ecija ha triplicado el número de profesionales en la capital, por lo que las sucesivas ampliaciones en la oficina de la Torre de Cristal no bastaban. La búsqueda se inició a comienzos de 2021 y ha sido liderada con “ilusión” por el comité ejecutivo en España. La apuesta es clara: “Queremos seguir incorporando al mejor talento y que el espacio físico no suponga una limitación”, afirman. Sin olvidar la marca: “Buscábamos abanderar un edificio singular y representativo, que reflejase la dimensión y posicionamiento de Ecija en el mercado legal”. Las posibilidades del inmueble permiten, además, “adaptarse a la gran diversidad de clientes y formas de trabajar”. El objetivo es estar operativo desde Serrano, 69, el 1 de enero de 2023. Ya hay un concurso para elegir la empresa que realizará la reforma, y “trasladar los valores de Ecija a la nueva sede”.