Contra la piratería, ni abrazos ni balazos
Artículo publicado en El Universal.
Voluntad, contundencia y acción es lo que se necesita para hacer frente a la piratería y a sus innumerables y graves consecuencias que van mucho más allá de la violación a los derechos humanos de propiedad intelectual (PI) y los enormes daños en tal o cual rubro.
En México, la piratería además de representar pérdidas económicas tanto a los titulares de derechos de PI, como al fisco, por un monto de más de 44 mil millones de pesos, ha permeado en la sociedad al grado de, no digamos tolerarla, sino aceptarla. No obstante ser un pueblo “bueno y sabio” que considera a la falsificación de marcas y derechos de autor como algo normal e inofensivo, la realidad es que los daños atentan contra el tan mentado bienestar que se pretende, como a los, también tan recordados, cultura y valores del gran pueblo mexicano.
Así como hay mediciones internacionales en materia de solicitudes, trámites y concesión de patentes y de registros de marcas, también hay estudios en torno a la violación de derechos de PI y las acciones implementadas por los países al respecto. Los reportes más influyentes son los publicados por la Oficina del Representante Comercial de los Estados Unidos (USTR) y por la Comisión de la Unión Europea. En ambos casos, la realidad mexicana es abordada concluyéndose que, por un lado, el problema es grave y, por el otro, que falta voluntad y mucho por hacer en contra de la piratería.
El pasado 30 de enero, la USTR publicó la Lista de Mercados Notorios de Falsificación y Piratería 2023. Este informe anual identifica y enumera los mercados en línea y físicos que se dedican o facilitan la falsificación de marcas registradas o la piratería de derechos de autor.
La Lista de Mercados Notorios está estrechamente relacionada con el Informe Especial 301, que es el otro –muy influyente– reporte anual publicado por la USTR. Mientras que la Lista se centra específicamente en identificar los lugares –físicos y virtuales–de piratería y falsificación, el 301 evalúa más ampliamente la protección de la propiedad intelectual en países de todo el mundo.
México no se salva de la Lista. El reporte hace alusión a cuatro mercados problemáticos, uno virtual y tres físicos. Aún y cuando se destaca que en octubre de 2023 los titulares de derechos de autor lograron cerrar uno de sus dominios (peliplus.lat), PELIPLUS, que opera desde México, sigue proporcionando acceso a películas y series de televisión pirateadas.
Por lo que hace a los físicos, el reporte destaca a La Cuchilla, en Puebla, como el mercado más pirata en el sureste. Con aproximadamente 120 almacenes y 150 tiendas que venden productos piratas, La Cuchilla ha crecido en notoriedad y peligrosidad debido a la presencia del crimen organizado.
El mercado de San Juan de Dios, en Guadalajara, y Tepito, repiten en la edición 2023 de la Lista. Del primero se destaca que más de la mitad de sus 3 mil locales se dedican a la venta de ropa, calzado, artículos para el hogar, productos farmacéuticos y accesorios falsificados, así como software pirateado, películas y dispositivos para eludir sistemas de protección de videojuegos electrónicos. De Tepito, se destaca que opera como centro de distribución de productos pirata para México y Centroamérica.
Si bien los datos duros son relevantes y necesarios, la USTR señala en su reporte que, a pesar de las flagrantes actividades delictivas en los mercados mencionados, las autoridades mexicanas no llevaron a cabo operativos antipiratería durante 2023. Esto es grave y podría dar pie a reclamos por inobservancia a las obligaciones asumidas por México en el marco del T-MEC.
La inclusión de México en la Lista 2023 reitera la urgencia de hacer algo en contra del cáncer de la PI. Es fundamental que haya voluntad de las autoridades mexicanas para actuar en consecuencia, aceptando en todo momento la colaboración de todas y cada una de las partes interesadas. El actuar contundente y colaborativo trajo en el pasado buenos resultados; aprendamos de ello, pongamos en marchas las mejores prácticas, adaptémoslas y mejorémoslas.