Fintech: 5 retos y sus claves jurídicas
En los últimos años, la eclosión de servicios financieros sustentados en tecnología (“Fintech”) se ha mantenido en constante crecimiento gracias a empresas e iniciativas cuyo valor diferencial es la capacidad de ofrecer soluciones financieras innovadoras, eficientes, accesibles (vía aplicación móvil, principalmente) y personalizadas a los usuarios.
Los servicios Fintech se constituyen como una alternativa a las instituciones financieras tradicionales. En el contexto de la revolución tecnológica actual, las Fintech seguirán desempeñando un papel clave en la transformación del sector financiero, enfrentando una serie de retos, cuyas claves enunciaremos a continuación.
- INTEGRACIÓN DE LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL
Mediante la integración de inteligencia artificial (“IA”), las Fintech pueden mejorar su eficiencia y precisión en el desempeño de las siguientes tareas:
- En el diseño y mantenimiento de programas de prevención de blanqueo de capitales (“PBC”) eficaces, garantizando el cumplimiento de la normativa y minimizando el riesgo de sanciones y acciones coercitivas.
- En la agilización y cumplimiento de las obligaciones Know Your Customer (“KYC”), reduciendo el tiempo y los recursos dedicados a los procesos manuales mediante la automatización de la recopilación y análisis de los datos de sus clientes.
- En la automatización de la recopilación y análisis de datos en el ámbito regulatorio, generando informes precisos en tiempo real y permitiendo una adaptación constante a las diversas regulaciones.
Para ello, es esencial que la IA sea capaz de comprender los requisitos regulatorios intrínsecos al sector, ofreciendo suficiente exactitud e integridad de los datos generados, lo cual exige la sofisticación en el diseño e implementación de los sistemas y algoritmos impulsados por IA, así como su supervisión y prueba continuas.
Además, el uso de la IA requiere un alto grado de transparencia, unida a la capacidad de proporcionar explicaciones claras de los datos y algoritmos subyacentes, garantizando una comprensión clara en cuanto a cómo los algoritmos de IA están tomando decisiones, lo que puede resultar clave frente al regulador.
- OPEN BANKING Y PROTECCIÓN DE DATOS
Las iniciativas de banca abierta (“Open Banking”) están transformando el sector financiero, al permitir a consumidores y empresas compartir de forma segura sus datos financieros con terceros proveedores, posibilitando el desarrollo de productos y servicios financieros innovadores, adaptados a las necesidades individuales, e impulsando mejoras en la experiencia del cliente.
Si bien las Fintech ya cuentan con notables obligaciones impuestas por la normativa de protección de datos, las iniciativas de Open Banking plantean cuestiones específicas en esta materia tales como:
- Garantizar el cumplimiento de la normativa de protección de datos con un enfoque global, con especial atención a las transferencias internacionales de datos.
- Obtener el consentimiento informado de los clientes a la hora de compartir sus datos financieros con terceros. Las Fintech deben redactar formularios de consentimiento claros y transparentes que cumplan los requisitos normativos, garantizando que sus clientes estén plenamente informados de cómo se utilizarán y protegerán sus datos.
- Velar por la seguridad de los datos y respuesta a las brechas. Dada la naturaleza sensible de los datos financieros, las Fintech deben implementar medidas de seguridad sólidas para proteger la información de sus clientes contra el acceso no autorizado, la pérdida, o el uso indebido, garantizando procedimientos adecuados de respuesta ante posibles brechas, minimizando así el riesgo de posibles sanciones y el inherente daño reputacional.
- REGULACIÓN DE ACTIVOS DIGITALES Y BLOCKCHAIN
La tecnología blockchain y el auge de las criptomonedas y los activos digitales suponen una oportunidad para las Fintech de revolucionar el sector financiero a través de los sistemas de pago, la gestión de activos y la negociación de valores. Para ello surgen los siguientes retos:
- Adaptación al panorama normativo, que se encuentra en constante evolución, para adaptar las prácticas empresariales de las Fintech a un ritmo adecuado que garantice un cumplimiento integral, minimizando así posibles riesgos legales.
- El desarrollo de la Tokenización de activos, entendiendo por este el proceso de convertir activos del mundo real, como bienes inmuebles o propiedad intelectual en tokens digitales dentro de una cadena de bloques permite la propiedad fraccionaria, el aumento de la liquidez y la agilización de las transacciones.
- La identificación y protección de los derechos de propiedad intelectual.
- PAGOS INTERNACIONALES
Las Fintech desempeñan un papel cada vez más importante a la hora de facilitar transacciones internacionales más rápidas y eficientes, permitiendo a empresas y particulares enviar y recibir pagos a través de las fronteras internacionales con facilidad, siendo sus retos principales:
- El reporte regulatorio y registro de la información, adaptándose especialmente a la pluralidad de jurisdicciones a las que una misma operación puede estar sujeta.
- La coordinación interjurisdiccional, siendo capaces de enfrentarse a cualquier conflicto o incoherencia desde una perspectiva global, permitiendo garantizar al cliente una operación y servicio a gran escala.
- M&A Y FINTECH
El derecho de fusiones y adquisiciones (“M&A”) supone una gran oportunidad para las Fintech que, en su estrategia de expansión y crecimiento, pueden acudir a operaciones societarias como vía de adquisición de nuevas tecnologías, ampliación de su base de clientes, o mejora de posición en el mercado. No obstante, las operaciones de M&A en este sector deben enfrentar las siguientes consideraciones:
- La naturaleza innovadora y disruptiva de las Fintech dificulta la evaluación de su potencial de crecimiento y éxito a largo plazo, lo que supone una complejidad añadida al proceso de valoración de una
- Dado que las Fintech a menudo basan sus modelos de negocio en tecnologías innovadoras y complejas, es habitual que una parte significativa del valor económico de una Fintech (a efectos de valoración de operación de M&A) resida en los activos tecnológicos y derechos de propiedad intelectual que posee, siendo fundamental garantizar que estos activos se transfieran e integren adecuadamente en el contexto de estas operaciones.
En definitiva, el crecimiento demostrado por las Fintech, derivado de su capacidad de innovación en la oferta de soluciones financieras, pone sobre la mesa una serie de retos a los que este sector debe enfrentarse, si quiere mantenerse como una de las puntas de lanza de la innovación en el sector financiero.
Los sistemas y algoritmos basados en IA pueden entrenarse para reconocer patrones y anomalías en los datos de las transacciones, lo que ayuda a identificar actividades potencialmente fraudulentas con mayor rapidez y precisión, lo que hablita a las Fintech a reducir riesgos, protegiendo a sus clientes frente al fraude, y agilizando los procesos relacionados con las obligaciones en materia de PBC, KYC y reporte regulatorio.
El cumplimiento de la normativa de protección de datos (especialmente a lo que respecta en el ámbito del Open Banking), junto con la regulación de la tecnología blockchain, se une al reto de garantizar la seguridad de los datos de los clientes y, en la mayoría de casos, la obtención de un consentimiento informado para su tratamiento.
Por otro lado, las iniciativas y avances relacionadas con la tecnología blockchain y la tokenización de activos, junto con la evolución del panorama normativo en torno a las criptomonedas y el blockchain, sin duda introducirán nuevas oportunidades y retos para las Fintech.
Los retos derivados de la concurrencia de legislaciones en materia de pagos internacionales son elementos a tener en cuenta para las Fintech, que pueden apoyarse en las operaciones de M&A para afianzar y asegurar su crecimiento.
Así, para garantizar un camino sostenible hacia el éxito, las Fintech deben continuar trabajando en el desarrollo de soluciones tecnológicas disruptivas, innovadoras, transparentes y seguras, manteniéndose actualizadas en todo momento en cuanto a las nuevas normativas y regulaciones aplicables, mediante el uso responsable de la IA y sus capacidades.